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Testigos




“Vosotros sois testigos de esto” 
(Lc 24,48)  

Hay personas que son testigos de paz y humildad, de bondad y perdón, de solidaridad y lucha por la justicia.
¿Será en la casa de estos pobres donde se esconde Jesús?
Vete hoy con los ojos abiertos.
Si encuentras a alguien que se parece a Jesús, detente un rato y conversa con él.       

Lo que podemos saber de "Dios", nos lo revela "Jesús".

Si te escondes en mi vida, Señor, ¿por qué te busco fuera de ella?  

“Podemos ser testigos mudos de gravísimas desigualdades cuando se pretende obtener importantes beneficios haciendo pagar al resto de la humanidad, presente y futura, los altísimos costos de la degradación ambiental” (LS 36).

Sí, somos testigos, a veces mudos, de la basura que degrada, de mares contaminados, de hileras de pobres, que abandonan su tierra y huyen de la guerra.
Somos testigos de cómo los contaminantes atmosféricos producen serios quebrantos sobre la salud.
Somos testigos de discursos incapaces de encontrar salida a la situación.
Pero somos testigos de la Pascua de Jesús, y en Él, somos testigos de una nueva creación, de una nueva manera más austera y solidaria de vivir la vida.
Si reaccionamos, habrá esperanza para nuestro planeta y para los pobres. 

La belleza, más que en la estética, está en la bondad y el amor que han regalado nuestras manos.



«Les abrió el entendimiento 
para comprender las Escrituras» 
(Lc 24,45)

Seguramente es lo que el Espíritu Santo desea hacer diariamente en nosotros, si lo dejamos actuar.
Porque la vida cristiana es un discernimiento continuo para descubrir caminos de fidelidad el Evangelio.
Caminos para ser testigos de la presencia de Jesús resucitado en el mundo, de la conversión y reconciliación a que Él nos invita, y comunicadores de su paz.

 - Señor Jesús, haznos bien conscientes de que siempre caminas a nuestro lado.
Para que podamos colaborar con plena responsabilidad en la construcción del mundo como tú propones.

Jesús vivo, amigo cercano que caminas con nosotros, que soportas nuestras dudas sobre ti.
Son muchos los obstáculos que tenemos para reconocerte en tus acciones, para comprender tu Palabra.
Gracias por tu paciencia infinita. 
Ábrenos el entendimiento para reconocerte y ser tus testigos.

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