"El niño iba creciendo y fortaleciéndose, se llenaba de sabiduría y la gracia de Dios estaba con él" (Lc. 2, 22-40) En un mundo donde todo se compra y se vende, la familia es un lugar de amor incondicional y gratuito donde cada uno es querido por lo que es, no por lo que produce. Este espacio es verdaderamente sagrado. Un refugio en la tormenta y la alegría en la dificultad. La misión de la familia es fundamental para un desarrollo integral y armónico. El modelo de familia es la de Nazaret. Los padres lo llevan a Jerusalén a presentarlo al Señor. Cumplen la ley. Simeón se admira, y Ana habla del niño. Él va creciendo. Mirar a Jesús, María y José… que demuestran que el amor siempre puede más. Mirar a la vida como la Sagrada Familia… una familia que vive unida en el amor y la oración. La familia de Jesús fue santa pero no perfecta: embarazo antes de la boda, parto a la intemperie, desterrados, pierden al niño en un viaje, el niño con...