Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2017

Ligero de equipaje, te sigo Jesús.

Imagen
“Quién deje casa… por mí y por el Evangelio recibirá ahora,  en este tiempo, cien veces más”  (Mc 10,29-30).    En el Reino no habrá miseria, sino afecto abundante para todos. ¿Cuál es tu salario por ser seguidor de Jesús? “Recibiréis en este tiempo cien veces más, con persecuciones, y en la edad futura, vida eterna”. Dios es buen pagador. Haz frente al deseo de acumular con tu vida compartida.   Ligero de equipaje, te sigo Jesús. En mi mochila, tu alegría y un pan para una eucaristía. Necesitamos mirarnos a nosotros mismos y preguntarnos: ¿Qué me impide ser fiel a mi bautismo? ¿Qué me impide ser fiel a la gracia de Dios? ¿Qué me impide ser fiel a la misión que Dios me encomienda? ¿Qué me impide ser fiel a mí mismo? ¿Qué me impide ser fiel al Evangelio? ¿Qué me impide ser fiel al cambio? Seremos libres cuando podamos decir como Pedro: “Señor, nosotros que lo hemos dejado todo y te seguimos”. Seremos libres cuando no tengamos l

Como un niño

Imagen
“De los que son como los niños es el Reino de Dios”  (Mc 10,14)  Las cosas bellas empiezan a nacer en el corazón de un niño. El don de Jesús se convierte en ellos en una fuente de gracia para todos. Acércate a los pequeños, míralos con cariño. Poco a poco te descubrirás tu propio rostro. Ando buscando tu rostro, Señor.  Y Tú te escondes en los pequeños. Enséñame a recorrer los caminos de la infancia confiadamente.    • Señor, que acoja a las personas tal cual son.   Señor, delante de ti yo quiero ser sólo un pobre, quiero despojarme, Señor, de mis pretensiones y vanidades; también, Señor, quiero traspasar mi propia culpa y entrar a tu casa desnudo, meterme en tu corazón como un niño. Quiero mirarte a los ojos suplicándote confiadamente. Quiero, Señor, y deseo apoyarme sólo en tu amor, descansar en tu amor y llenarme de la alegría de haber hallado tu amor. Tu amor es la casa que me tienes preparada; he sentido tu invitación