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Mostrando entradas de mayo, 2018

Llevar a Cristo

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“¿Quién soy yo para que me visite  la madre de mi Señor?”  (Lc 1,43) Una sola palabra:  Servicio.    Se puso en camino para servir. "A los hambrientos los coma de bienes.  Su Misericordia llega a sus fieles." Santa María, enséñanos a ser como tú, iglesia en salida, siempre dispuestos a servir donde sea necesario, a llevar a Cristo a los demás, a ser bendición para quien se cruce en nuestro camino. “¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?” Visitas que alegran el corazón. Encuentros que transforman al otro. Saludos que despiertan lo mejor de los demás. Personas que son bendición cuando las vemos. Qué bueno es compartirlo todo y relajarse sabiendo que entre muchos hombros la carga es más liviana y llevadera, la comunión se agranda y el espíritu comienza a creer que es posible lo imposible. 'Venid a mí', aproximaos, uníos. Y 'confiad en el Señor'. Mira bien a aquellos que te rodean. Cada uno

Aprender a servir

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“El que quiera ser grande,  sea vuestro servidor”   (Mc 10,43).    Jesús va a Jerusalén a dar la vida. El Hijo del Hombre va a ser entregado, lo condenarán a muerte, lo matarán y resucitará. La esperanza se abre paso a pesar de todo. Morir, dar la vida para resucitar. Los discípulos van a Jerusalén con pretensiones de acumular poder y dominio. El contraste es evidente. “El que quiera ser grande, sea vuestro servidor.” El que quiera ser rico, reparta sus bienes. El que quiera ser famoso, pase a la retaguardia. El que quiera dar lecciones, dé ejemplo... El que quiera seguir la lógica del mundo, no comprenderá la ilógica de tu mensaje Recorre este día el sendero del servicio. No es muy transitado, pero conduce a un bellísimo paisaje.   Cada noche me preguntas: ¿Serviste hoy? Y yo, sin decir nada, te muestro el delantal, abro mis manos ante Ti. Nos has mostrado con tu ejemplo, Señor, que es posible vivir para los demás. Tu vida es u

Ligero de equipaje

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“Quién deje casa…  por mí y por el Evangelio recibirá ahora,  en este tiempo, cien veces más”   (Mc 10,29-30).    En el Reino no habrá miseria, sino afecto abundante para todos.   ¿Cuál es tu salario por ser seguidor de Jesús? “Recibiréis en este tiempo cien veces más, con persecuciones, y en la edad futura, vida eterna”.   Dios es buen pagador.   Haz frente al deseo de acumular con tu vida compartida.   Ligero de equipaje, te sigo Jesús.   En mi mochila, tu alegría y un pan para una eucaristía. Podría seguir así, ir tirando más o menos.. ¿Por qué complicarme la vida? Tampoco es para tomárselo tan en serio, ¿no? Pero tengo sed de Ti, Señor. Quisiera no tener que elegir no tener que tomar una decisión, Preferiría no hacer una opción. ¿Para qué tanta exigencia? Tampoco es para ponerse tan radical, ¿no? Pero tengo sed de Ti, Señor. Hasta aquí he llegado, y aquí me paro A mí que no me despierten, estoy cansado. Ya está bi

¿Cuál de tus riquezas te impide ir con Jesús?

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“Dios lo puede todo”  (Mc 10,27).     ¿Cuál de tus riquezas te impide ir con Jesús? Hay pan para todos cuando el reino de Dios desencadena procesos de entrega y solidaridad.  No comiences la jornada a solas.  Hazlo siempre con Dios.  “Se marchó pesaroso, porque era muy rico.”  El seguimiento a Jesús no es cuestión de cumplimiento sino de desprendimiento.  La humildad y la sinceridad de corazón son la garantía del inicio de un cambio significativo de tu vida. Abro mis manos y mi corazón y me dejo hacer por ti.  Yo me hago capacidad y Tú te haces torrente de gracia. Jesús, hoy me acerco y me encuentro ante Ti tus propuestas me parecen inalcanzables, como al joven rico y los apóstoles Siento que la propuesta del Evangelio está demasiado alejada de lo que yo puedo hacer, que en la vida real no se puede vivir con esa radicalidad. A veces tengo la sensación que no voy a poder vivir plenamente tu Evangelio. Jesús, miraste con cariño a aquel joven

¡Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo!

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« Y sabed que yo estoy con vosotros  todos los días,  hasta el final de los tiempos»   (Mt 28, 16-20). Con la fiesta de hoy celebramos a Dios como Misterio que se nos regala. Nosotros los amigos de Jesús sabemos por él, que Dios es su PADRE.  Que Jesús estaba confiado en las manos de su Padre, porque era HIJO.  Y entre los dos, Padre e Hijo, había un lazo de unidad muy fuerte, que era su AMOR.  Así los tres eran uno. En nuestras manos está la llave-Espíritu que nos lleva a Jesús, que nos abre la puerta a Dios que es la casa repleta de amor en la que habitar. Gracias, Dios nuestro, porque podemos rezarte en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, ya que Tú eres Amor fiel con todos nosotros. Te damos Gracias porque Tú, Dios Bueno, nos amas con Ternura y Misericordia infinita, y aunque seas inalcanzable para nuestra razón, siempre te haces cercano en nuestro corazón. Te damos Gracias, Santísima Trinidad y Dios nuestro, porque e

Como un niño

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“De los que son como los niños  es el Reino de Dios”   (Mc 10,14)  SER COMO UN NIÑO Retrato de un niño en tiempos de Jesús: Frágil y vulnerable. Marginal y secundario. Confiado y dependiente. Inútil y despreciado. Retrato de un niño en la actualidad: Inocente y puro. Bueno y guapo. Central e importante. Listo y apreciado. Las cosas bellas empiezan a nacer en el corazón de un niño. El don de Jesús se convierte en ellos en una fuente de gracia para todos. Acércate a los pequeños, míralos con cariño. Poco a poco te descubrirás tu propio rostro. Ando buscando tu rostro, Señor.  Y Tú te escondes en los pequeños. Enséñame a recorrer los caminos de la infancia confiadamente.    • Señor, que acoja a las personas tal cual son.   Señor, delante de ti yo quiero ser sólo un pobre, quiero despojarme, Señor, de mis pretensiones y vanidades; también, Señor, quiero traspasar mi propia culpa y entrar a tu casa desnudo, meterme en

Unidos en el corazón

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“Serán los dos una sola carne”   (Mc 10,8)    Éste es el sueño de Dios:  Una pareja, un proyecto de vida común.  Desde el amor, la pasión, la entrega y la libertad.  Nadie dijo que fuera fácil. Así es el milagro del amor; no conduce al dominio sino a la comunión.  Ninguna ley humana puede destruir esta igualdad de hombre y mujer querida por Dios.  Da tu apoyo a las iniciativas que potencien la igualdad en dignidad de hombre y mujer, la complementariedad de sus dones para un mundo mejor.  Mirar juntos la vida, vivirla juntos.  Darse más que dar, día tras día.  Abrazos entrañables, abiertos a la vida.  Gracias, Señor, por tu amor.  Gracias, por cada mujer y cada hombre unidos en el corazón.

Dar la vida

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«En verdad os digo que no volveré  a beber del fruto de la vid  hasta el día que beba el vino nuevo  en el reino de Dios»   (Mc 14, 12a. 22-25). El jueves siguiente a Pentecostés celebramos la fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote.  Jesús inaugura un estilo de sacerdocio nuevo: - En la última noche con sus discípulos, Jesús hizo un Gesto que resumía toda su vida y daba sentido a su muerte:  Una vida entregada, amante, servidora, agradecida, reconciliadora, fraternal, sacrificada, continuamente pendiente de lo que el Padre le pedía... y encomendó a sus discípulos que le tomaran el relevo, que vivieran y entregaran su vida como él, que hicieran «aquello mismo» en memoria suya, en su nombre.   De modo que estamos llamados a convertir nuestra vida en una continua celebración eucarística... que haga posible que, cuando nos reunamos en su nombre, el partir el pan sea expresión de que continuamente nos partimos, compartimos, repartimos y entregamos a los her

Tiende las manos

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“No es de los nuestros”   (Mc 9,38)   ¿Por qué nos tememos tanto? ¡Qué bien marcamos distancias! Los malos y los buenos, los creyentes y los ateos, los carcas y los progres, los ricos y los pobres. ¿De dónde nos nace este afán por dividir y trazar fronteras, cuando lo nuevo de Dios es la comunión? Destruye toda muralla que te impida ver el sol. Pide al Espíritu el don de poder amar a todos. Descubre lo valioso en los otros, reconoce la bondad ajena. No te cierres al que es distinto y tiene otras ideas. Busca puntos de encuentro, tiende la mano a todos los que quieran luchar contra los demonios de nuestro mundo. Lo que importa no es estar en el bando “correcto”, sino servir al hombre y aliviar su sufrimiento. Padre, si todos son tus hijos, ¿cómo es que no son mis hermanos? Espíritu de amor, recrea la comunión en mi corazón. No todos están a favor nuestro, ni todos en contra nuestro, Señor. Aquellos que comparten la misma fe,

Ser servidor de todos

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“Quien quiera ser el primero,  que sea el último de todos  y el servidor de todos”   (Mc 9,35).  Jesús reitera su enseñanza sobre el destino del Hijo del hombre; pero los discípulos no entienden, tienen miedo a que Jesús les sorprenda.  Lo quieren seguir con el equipaje de sus criterios humanos. Jesús les explica lo que supone estar con él: tienen que dejar de lado toda ambición, y ser el servidor de todos. En la misión no van solos, llevan la presencia de Jesús y del Padre.   Escribe hasta que lo aprenda tu corazón: SER SERVIDOR DE TODOS En todo amar y servir... para eso quiero vivir. Ocupar el primer puesto es ser el primero en servir, en, dejar la vida para que los demás crezcan. Orar es abrir los oídos a los pequeños, a los que apenas tienen voz en la tierra. Hoy celebramos a Santa Rita de Casia “La santa de Casia es una de las numerosas mujeres cristianas que ‘han incidido significativamente tanto en la vida de la Iglesia como en l

Madre de la Iglesia

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SANTA MARÍA, MADRE DE LA IGLESIA, ruega por nosotros. Hoy celebramos por primera vez a la Virgen María, Madre De la Iglesia.  Esta memoria la ha introducido el Papa desde este año. El papa quiere que todos, como la primera comunidad cristiana, nos unamos en oración con María y de ella aprendamos a vivir como discípulos de Jesús.   María Niña con el mundo en el alma. Sutil, discreta, oyente, capaz de correr riesgos. Chiquilla de la espera, que afronta la batalla y vence al miedo. Señora del Magníficat, que canta la grandeza velada en lo pequeño. Y ya muy pronto, Madre. Hogar de las primeras enseñanzas, discípula del hijo hecho Maestro. Valiente en la tormenta, con él crucificada abriéndote al Misterio. Refugio de los pobres que muestran, indefensos, su desconsuelo cuando duele la vida, cuando falta el sustento. Aún hoy sigues hablando, atravesando el tiempo mostrándonos la senda que torna cada ‘Hágase’ en un nuevo comienzo. (José María

La fe es un regalo

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“Todo es posible al que tiene fe” (Mc 9,23).   Jesús siempre se acerca y se deja afectar por los males que aquejan al ser humano.  Se sorprende ante la fe trabajosa del padre, el estupor y la incomprensión de la gente, y la frustración de los discípulos.   Jesús indica la fe como condición para curarse, porque para Dios nada hay imposible.   «Tengo fe, pero dudo; ayúdame.» La fe es un regalo. Nunca somos dueños de ella por completo. La fe es un regalo. Pedirla con humildad es la única posibilidad. Aunque nosotros perdamos la fe en Dios, Él nunca pierde la fe en nosotros. Orar es confiar totalmente en Jesús que trae la salvación.   “¡Creo, Señor, ayuda mi fe!” ¡Creo, Señor, pero aumenta mi fe! ¡Creemos, Señor, pero aumenta nuestra fe!

Espíritu que fortalece y vivifica

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«Recibid el Espíritu Santo»   (Jn 20, 19-23). Hoy es la solemnidad de Pentecostés, la fiesta del Espíritu. La alegría de la Pascua se hace más plena por el don del Espíritu. Jesús quiere dar a nuestro pobre corazón el Espíritu del Amor, a nuestra cabeza el Espíritu de Sabiduría, a nuestra débil voluntad, el Espíritu de Fortaleza, y para liberarnos del miedo, el Espíritu de la valentía... El Espíritu Santo es nuestro defensor, nos la paz, nos hace testigos de su misericordia y su perdón. Demos gracias a Dios por el don que se nos ofrece y abramos de par en par nuestra vida para que el Espíritu Santo penetre hasta lo más profundo de nuestra existencia.  Pentecostés: el Espíritu nos mueve, nos hace iglesia, rescata al mundo y nos llena de dones... ...Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos... ¡Ven, Espíritu Santo! … Ven, E

Testimonio

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“En la cena se había apoyado en su pecho”   (Jn 21,20)    ¡Qué importancia tienen para toda la comunidad los que se han sentido amados por Jesús y han buscado frecuentemente su intimidad! Da apoyo y aliento a todos los que viven con el corazón encogido por el terrorismo. Busco cada día la intimidad contigo. Mi corazón, Señor, es para ti. Gracias por las presencias alentadoras que encuentre entre la gente.  Te doy gracias, Señor, de todo corazón, porque eres bueno porque tu misericordia es infinita Has puesto tu mirada en mí, Dios de amor. ¡Que puedo decirte si Tú me conoces del todo! Me he quedado mudo ante tu presencia porque soy poca cosa y, sin embargo, me amas. Al más infiel de tus siervos muestras tu mirada de amor y le dices: ¡Levántate! ¡Sígueme! Y yo, escuché tu voz y confié en ti. Señor confío en ti, porque tú eres amor, justicia y misericordia infinita.

Tan solo, sígueme.

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"Sígueme"   (Jn 21,19)    Estamos llamados a ser hermanos que se cuidan y velan unos por otros con el mismo amor del Padre. Intenta mirar a cada persona como un hermano, o como a un hijo o como a ti mismo. Jesús tiene entrañas de misericordia. No nos humilla aunque le fallemos. Su perdón llega aun antes que la ofensa. Sólo quiere que le amemos, aunque caminemos con pies de barro. A veces, un acto aparentemente insignificante, puede cambiar la vida de una persona. Lo que cuenta es el amor que ponemos en lo que hacemos, la orientación al bien de cada palabra, cada pensamiento, cada gesto. Jesús nos conoce y sabe que somos aves de vuelos cortos, aún así nos llama. Sabe de nuestros miedos, cansancios, tendencia a la comodidad, y aún así nos llama. Invoca al Espíritu. Él es quien renueva en ti la espontaneidad de tu respuesta a Jesús. Incluso en los días de tormenta permanece contigo.   Espíritu Santo, despiértame a una compasión y a u

“Uno”

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"Que todos sean uno"   (Jn 17,21 )     Tu anhelo más profundo. Que todos sean uno. Tu oración más sentida. Que todos sean uno. Nuestro compromiso más rotundo. Que todos sean uno. Nuestra vida más genuina. Que todos sean uno.   El Padre nos regala hermanos y hermanas para hacer el camino en compañía.  Jesús nos desvela la dignidad y belleza de los pequeños de la tierra. El Espíritu nos desafía a ver si somos capaces de ver en la creación la huella de Dios. Acoge hoy los dolores y gozos de los pueblos de los que hablan los medios de comunicación.  Son mucho más que una noticia pasajera.  Tú, todo lo has dejado vestido de hermosura. Perdona que a veces no lo sepa descubrir. Perdona que la suerte de los pobres me sea indiferente.    Cuando llenas mis velas e impulsas mi navío hacia adelante, hacia la luz que surge en el levante, ella me atrapa y todo lo recrea. Cuando soplas como el viento de la tarde y tu presen