PASEO MARÍTIMO DE ALMERÍA Paseaban una pareja joven, con su cochecillo de bebé de tres meses, esos que parecen regalados por los abuelos, porque tiene pinta de ser carísimos, engalanado por la criatura, vestida de rosa, de arriba abajo y con todos los aditamentos de chupete de plata, mantita bordada, bolsa de coche conjuntada con el resto de elementos… tan orgullosos ellos y tan tranquilos, cuando, de pronto, se arremolinó un montón de gente alrededor de unos guardias civiles que acababan de rescatar, de una patera, el cadáver de una joven negra, de menos de 30 años y el de un bebé de meses, mínimo, por su desnutrición y su deshidratación, que todavía conservaba un hilo de vida, también les acompañaba otro joven varón, que no recuperaba el conocimiento, pero que parecía estar mejor que los otros dos. Todo el mundo estaba impresionado y gesticulaba enternecido, hasta que, de pronto, la madre blanca le preguntó al guardia civil si podría probar a dar el pecho al niño. Todos se q...