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Mostrando las entradas etiquetadas como Viernes octava Pascua

Eres Tú

  "Estaba ya amaneciendo,  cuando Jesús se presentó en la orilla."    (Jn 21,1-14). Amanece en nuestras vidas cuando nos encontramos al Señor. Se presenta discreto, en la orilla de nuestra vida, sin invadirnos, sin ordenarnos. Y nos pregunta si hemos pescado algo. ¿De qué hablas? ¿Por qué lloras?, ¿Tenéis peces? Siempre pregunta algo personal para oír nuestra voz, para que le reconozcamos. Y al oír como pronuncia nuestro nombre todo cambia. ¡Es el Señor! ¡Vive, me acompaña, nos cuida, nos ama! Tiempo de reconocer los frutos que su vida da en la nuestra. Aquella noche no pescaron nada. Están todos los discípulos, pero faltaba Jesús. Echad las redes en su palabra es no poder sacarla por la multitud de peces. El Señor prepara las brasas, pero el pescado lo pone nuestra pesca, que si es por su palabra, será abundante. “Echad la red a la derecha y encontraréis” No nos damos cuenta pero lo que se nos pide no es algo imposible, sino que es algo tan sencillo c...

Él está con nosotros

  “Es el Señor”   (Jn21, 1-14). El evangelio relata la tercera aparición del Resucitado a seis de sus discípulos, al amanecer de una noche de pesca infructuosa en el lago de Tiberíades. Jesús –que en un primer momento no es reconocido– después de darles instrucciones, los habrá de sorprender con un almuerzo fraternal, preludio y figura del “Banquete Eucarístico”. Esta escena tan familiar pone de manifiesto, además, el aspecto “misionero” de la naciente Iglesia, representada aquí en los símbolos de la « barca », la « red » y los « peces »: Por algo Jesús les había dicho: Seguidme y yo os haré « pescadores de hombres ». “Él les dice: «Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis»”.   Cuantas veces nos empeñamos en hacer las cosas como mejor nos parecen sin escuchar la claridad de su mensaje. La vida sería mucho más sencilla y amable si dedicásemos un poco de tiempo a escuchar y hacer lo que él nos dice. Jesús se aparece a sus discípulos. Están pescando, ...

Le reconocemos

  «Es el Señor»    (Jn 21,1-14) Hoy se proclama la tercera aparición de Jesús a sus discípulos en el evangelio de Juan, y en esta ocasión junto al mar de Tiberíades. Este relato, lleno de significados eclesiales y espirituales, simboliza la tarea y misión de la Iglesia. Pedro como cabeza del grupo será el que asuma la tarea de liderarlos. Pero todos participan del mismo objetivo. Podemos descubrir que el éxito de la misión cristiana no depende del esfuerzo humano, sino de la presencia viva del Señor en ella. "Simón Pedro les dice: «Me voy a pescar». Ellos contestan: «Vamos también nosotros contigo»." Irse a pescar es lo mismo que ir a Emaús. Es volver a lo que vivimos antes de conocer a Cristo. Y es la respuesta humana frente a un gran trauma. Ante la cruz lo que sale es replegarse a lo conocido. Y Jesús se acerca a llenar de vida esas existencias vacías. Volver a lo de siempre sin Cristo es frustración y vacío. Lo de siempre con Jesús es sobreabundancia, y contemp...