"El que Dios envió habla las palabras de Dios, porque no da el Espíritu con medida." (Jn 3,31-36). Hoy el Señor Jesús resucitado te invita a hablar de lo que has visto y oído, de la Vida, con mayúscula, que Él te regala que es la vida de Dios en ti. Cuando más cerca estamos de Dios, más reconocemos que todo viene de Él. Todo lo creado es el escenario que Dios nos regala como escenario para desplegar nuestras vidas y convertirlas en historia de salvación. Cuando miramos lo que vivimos con ojos de fe aparece la gratitud a Dios por no medir su amor y por enseñarnos a través de Jesús a vivir hasta el extremo. Sin cálculos ni medidas. Del todo, siempre, a todos. “El que Dios envió habla las palabras de Dios, porque no da el Espíritu con medida”. La fe es un don. Se encarna en quien abre la puerta y acoge las sorpresas. Dios se nos da a lo grande. Jesús nos regala el Espíritu sin medida. En este derroche de gracia descubrimos lo que Dios quiere de no...