"Se hizo carne"

 

"En él estaba la vida, 

y la vida era la luz de los hombres."  

(Jn1,1-18).

 ¿Escuchas la melodía divina? Ha surgido un cambio profundo el Cielo ha descendido y se ha convertido en un pequeñito Niño, para ser nuestro compañero de camino, nuestro Amigo y Redentor. ¡Abramos las puertas a nuestro Emmanuel!

Al contemplar a Jesús, recién nacido, dejémonos impresionar por su ternura, para alabar a Dios, que nos ha manifestado su amor infinito. La Navidad nos pide acoger a un niño. Ese niño es la respuesta a la necesidad de amor y de paz que se eleva en este mundo nuestro ¡Feliz Navidad!

El λόγος (Logos), El Verbum, La Palabra que estaba junto a Dios, se instala entre la Humanidad. El que era desde el principio asume la limitación. El que por medio de él se hizo todo se hace niño dependiente. Luz que ilumina nuestras tinieblas. ¡Feliz Navidad!

Un corazón cálido, generoso, comprometido es el mejor lugar para acoger al Niño que acaba de nacer. ¡Seamos, cada uno de nosotros, un buen Hogar para Dios hecho Niño!

La Navidad nos pide acoger a un niño. Ese niño es la respuesta a la necesidad de amor y de paz que se eleva en este mundo nuestro.

¡Es Navidad!

Que la alegría que trae este Niño-Dios empape tu corazón y lo noten todos los que te rodean. ¡Feliz Navidad!

Dios nos acaricia hoy con su ternura. Y nosotros podemos acariciar a Dios, como se acaricia a un niño. Y Dios espera hoy nuestras caricias, Dios quiere sentir hoy la ternura de nuestros corazones en la ternura de nuestras manos.

Navidad ¡Día de las ternuras de Dios en las caricias de un Niño!
Navidad ¡Día de las ternuras nuestras con él en las caricias de nuestros corazones!
¡Hagámonos niños en el Niño!
¡Hagámonos ternura, en su ternura!
¡Hagámonos sonrisa en su sonrisa!
Ahora “ya lo hemos visto”.
Démoslo a conocer para que también otros “puedan verlo”.
¡Feliz Navidad a todos!

 

Gracias, Señor, por venir a nuestro encuentro
Por nacer en medio del silencio y de la indiferencia
Gracias, Señor, por ser luz en medio de la oscuridad
Por destellar resplandores de paz y de alegría
Gracias, Señor, por hacerte como nosotros
Por no importarte compartir nuestra condición humana
Gracias, Señor, por llenarnos de ilusión y de fe
Porque, el mundo, se maravilla con tu presencia
Gracias, Señor, por dejar la grandeza del cielo
Por aventurarte a vivir en tanta violencia que existe en el mundo
Gracias, Señor, por nacer en Belén.