Fe en un Dios que salva




L

“Levantaos, alzad la cabeza: se acerca vuestra liberación” 
(Lc 21,28)  

 Mantener la fe esperando la venida del Señor

Cuando termina el año litúrgico leemos textos sobre el fin de la historia. 
Palabras pronunciadas por Jesús en sus últimos días. 
Lucas incluye una descripción detallada de la destrucción de Jerusalén, vista como el fin de una etapa (a la que no hay que volver) y el inicio del anuncio del Evangelio a todo el mundo (tiempo de la Iglesia). 
A pesar del lenguaje apocalíptico y catastrófico, la venida del Hijo del hombre es un acontecimiento de liberación. 
La llegada del «Hijo del hombre» para reunir a la humanidad redimida no es motivo de miedo, sino garantía de liberación total y definitiva.

• Ayúdanos, Señor, a vivir intensamente la misión de anunciar el Evangelio en nuestro tiempo.
Acoge con esperanza la salvación que Dios te ofrece en los duros y complejos acontecimientos históricos humanos. 

En la fragilidad de mis tareas y compromisos me muestras tu Rostro, Señor, de la Vida y de la Historia. 
Me invitas a llevar contigo la cruz de cada día. 

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