Ser cristiano implica renacer por la gracia de lo alto, de Dios
Jesús es el hombre nuevo que quiere vivir como hijo de
Dios, es decir en el amor; el hombre que, de cara al mal en el mundo, elige el
camino de la humildad y de la responsabilidad, decide no salvarse a sí mismo,
sino dar la vida por la verdad y la justicia. Ser cristiano es vivir así, pero
este tipo de vida implica un renacer: renacer de lo alto, de Dios, por la
gracia...
Ojalá que cada cristiano, en este Año de la fe;
descubra la belleza de haber renacido de lo alto, del amor de Dios, y vivir
como su verdadero hijo.
Pues sí, es realmente decidirse al cambio de verdad.
ResponderEliminarUn abrazo.