Hoy hemos celebrado Pentecostés, la fiesta del Espíritu Santo, que cierra el tiempo de Pascua. Celebramos en ella la venida del Espíritu sobre nosotros, recordando aquel pasaje de los Hechos de los Apóstoles donde los discípulos reunidos en el Cenáculo, recibieron la fuerza y el impulso para la misión. En España quienes nos gobiernan quieren que la Iglesia, los cristianos nos quedemos callados; pero el espíritu nos impulsa a testimoniar la Verdad que es Cristo. "El hombre halla en Dios la plena realización de sí: esta es la verdad revelada por Cristo. El hombre se autorrealiza en Dios, que ha venido a su encuentro mediante su Hijo eterno” (“Tertio millennio adveniente” n. 9).
No tengamos miedo tenemos al Espíritu Santo.
Los Hechos de los Apóstoles, el Evangelio del Espíritu Santo, nos habla constantemente de a dónde llevaba ese Espíritu a la Iglesia. Allí se ve a los discípulos llenos de alegría en la proclamación de la Fe, llenos de valentía, “porque hay que obedecer antes a Dios que a los hombres…”
No tengamos miedo tenemos al Espíritu Santo.
Seamos valientes.
No tengamos miedo tenemos al Espíritu Santo.
Los Hechos de los Apóstoles, el Evangelio del Espíritu Santo, nos habla constantemente de a dónde llevaba ese Espíritu a la Iglesia. Allí se ve a los discípulos llenos de alegría en la proclamación de la Fe, llenos de valentía, “porque hay que obedecer antes a Dios que a los hombres…”
No tengamos miedo tenemos al Espíritu Santo.
Seamos valientes.
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