Lo que importa es amar.
“Amar al prójimo vale más que todos los
sacrificios”
(Mc 12,33).
La respuesta de Jesús a la pregunta del letrado es la
profesión de fe y plegaria que el fiel judío rezaba y reza cada día.
Y que
empieza invitando a escuchar, a saber captar la presencia y acción amorosa de
Dios en el mundo, el pueblo y cada persona.
Para Israel, el Dios único es el
creador del mundo y la humanidad, el libertador de la esclavitud, el dador de
la tierra prometida, el Padre...
Por tanto, se trata de escuchar para reconocer
que somos amados e invitados a responder adecuadamente.
- Gracias, Padre,
porque de muchos modos
nos das a conocer cómo nos amas.
Haz que correspondamos
generosamente a tu amor.
Lo que importa es amar.
Aprender a amar es la asignatura más importante de la
vida.
Quien está por el bien del ser humano no está lejos del
amor.
Como un estudiante
más, vete hoy a la escuela para aprender a amar.
Fíjate en lo que
necesitan los que están a tu lado.
Aprende de los que han explorado ya la tierra del amor y
son una presencia alentadora para todo camino.
Abro mi vida a los próximos.
Mi corazón se llena de nombres, de rostros.
Con todos los que me habitan te alabo y te bendigo,
Señor.
Comentarios
Publicar un comentario