Salvan la vida
"Si te ofende siete veces en un día, y siete veces vuelve a decirte: «lo siento», lo perdonarás." (Lc 17,1-6) Jesús en el evangelio nos propone tres puntos sobre los que examinarnos. El primero es no escandalizar. Poner cuidado en lo que decimos y hacemos. El segundo es el perdón. Sin límites. Y el tercero es la fe. Pedirla para experimentar lo que Dios puede hacer a través nuestra. Jesús habla del perdón, y nos aconseja no cansarnos nunca de perdonar: perdonad siempre. ¿Por qué? Porque yo he sido perdonado. En efecto, el primer perdonado en mi vida fui yo. Y por eso no tengo derecho a no perdonar: Estoy obligado, por el perdón que recibí, a perdonar a los demás. Así, perdona: una vez, dos, tres, setenta veces siete, ¡siempre! Incluso en el mismo día!. Y aquí Jesús exagera para ayudarnos a comprender la importancia del perdón. Porque un cristiano que es incapaz de perdonar, peca: no es cristiano. Tenemos un Dios muy generoso y paciente. No se cansa de esperar y de dar