¿Qué buscamos?
"Trabajad, no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna." (Jn 6,24-35). Nuestro Señor multiplica el pan en el desierto, mientras que en Caná transforma el agua en vino. Así acostumbra sus bocas a su pan y a su vino, hasta que llegue el momento de darles su cuerpo y su sangre. Les hace gustar un pan y un vino transitorios, para excitar en ellos el deseo de su cuerpo y de su sangre que vivifican. Les concede generosamente estas pequeñas cosas, con la finalidad de que aprendan que su regalo supremo será también gratuito . (San Efrén el Sirio) El evangelio de hoy está lleno de preguntas: ¿cuándo has venido?, ¿qué tenemos que hacer para realizar las obras de Dios?, ¿cuál es tu obra?… ¿Por qué buscamos a Jesús? ¿Qué queremos encontrar con Él? ¿De qué tenemos hambre? ¿Soluciones? ¿Sentido? ¿Encuentro? ¿Amistad? ¿Salvación? El ser humano es un buscador incansable de respuestas. Jesús les ayuda a contestar a todas: «Señor, danos