¿A quién buscáis?

 


Pasión de nuestro Señor Jesucristo. 
(Jn 18, 1 — 19, 42). 

Hoy Jesús nos pregunta: ¿A quién buscáis? Y nuestra respuesta dice dónde nos situamos. Si lo buscamos a él estamos al lado de quienes sufren, quienes hoy son crucificados. Si nos buscamos a nosotros, encontraremos la comodidad y la indiferencia.

En la vida aparecen muchas piedras en el camino, muchos momentos dolorosos, infinidad de cruces. Y podemos saber qué hacer en cada caso. Pero, ante la Cruz de Cristo, ¿cuál es tu respuesta?

Contempla la Cruz cuando te sientas cansado, impotente, herido, cuando el dolor te asalte. Déjate mirar por Cristo. Él puede sanarte. Comprende hasta qué punto ama Dios al mundo, al entregar a su hijo.

El misterio de la cruz: Amor que redime. Dolor que transforma. Entrega que libera. Muerte de la que brota la Vida. Abrazo, comunión, puente.

No desviemos la mirada de lo esencial. La cruz de Cristo es Luz, es icono de amor, de servicio, de entrega total...

Jesús convierte la injusticia humana de la cruz en algo completamente diferente. Su Cruz es de redención y no de condena. La ha convertido en lugar donde mirar para ser salvados. La Cruz es el gran abrazo de amor para toda la humanidad.

Pongámonos delante del Crucificado, fuente de nuestra paz, y pidámosle la paz del corazón y la paz en el mundo.

"En la Cruz está la vida y el consuelo y ella sola es el camino para el cielo"

 


Crucificadas

Crucificadas
las esperanzas
de quien se atrevió a adentrarse
en la entraña de la vida.
Los sueños de paz.
La verdad, crucificada
en nombre de lo conveniente.
Crucificado el amor
que no supimos entender.
Cruces, cruces en las veredas
de la historia, en los pozos
del desconsuelo. Cruces,
y gritos que rasgan el cielo
sin encontrar más eco
que el silencio.

No desesperemos,
pese a todo,
contra viento y marea,
contra pecado y orgullo,
contra egoísmo y cerrazón,

Dios abraza la cruz
para derribarla,
la callada no es su respuesta;
y la vida espera, pujante,
para vaciar
los sepulcros
de una vez por todas.


(José María R. Olaizola, sj)

 


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