UN ÁNGEL EN LA TIERRA SEÑOR ENSÉÑANOS A AFRONTAR LAS LUCHAS DE LA VIDA DIARIA “Señor crucificado y resucitado, enséñanos a afrontar las luchas de la vida diaria, para que vivamos en una mayor plenitud. Tú has acogido humilde y pacientemente los fracasos de la vida humana, como los sufrimientos de tu Crucifixión, así pues, ayúdanos a vivir las penas y las luchas que nos trae cada jornada como ocasiones para crecer y asemejarnos más a Ti. Haznos capaces de afrontarlas pacientemente y con coraje, llenos de confianza en tu apoyo”. (Santa Madre Teresa de Calcuta) "Líbrame, Jesús mío, del deseo de ser amada, del deseo de ser alabada, del deseo de ser honrada, del deseo de ser venerada, del deseo de ser preferida, del deseo de ser consultada, del deseo de ser aprobada, del deseo de ser popular, del temor de ser humillada, del temor de ser despreciada, del temor de sufrir rechazos, del temor de ser calumniada, del temor de ser olv...
Una imagen muy bonita Juanlu. Feliz dia del Seño.
ResponderEliminarUn abrazo.
Qué linda! Y el nombre de la Má... impresionante.
ResponderEliminarLa paz
De verdad la imagen respira una gran dulzura y el niño en brazo de María hace presente lo que dice el SALMO 130
ResponderEliminarSeñor, mi corazón no es ambicioso,
ni mis ojos altaneros;
no pretendo grandezas
que superan mi capacidad;
sino que acallo y modero mis deseos,
como un niño en brazos de su madre.
Espere Israel en el Señor
ahora y por siempre.
Señor Jesús, tú que eres manso y humilde de corazón, tú que dijiste que quien acoge a un niño te acoge a ti, tú que prometiste el reino de los cielos a los que se hacen como un niño, no permitas que nuestro corazón sea ambicioso, sino ayúdanos a acallar y moderar nuestros deseos, esperando en ti, como un niño espera en brazos de su madre. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.