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Perseverar en la esperanza



                                                             
 
 
Estad siempre despiertos, pidiendo fuerza” 
(Lc 21, 36)  

El año litúrgico termina con una llamada a la responsabilidad y coherencia de vida.  
El mejor comentario lo ofrece el Papa Francisco al hablar de las tentaciones de mundanidad espiritual que nos amenazan. Necesitamos un corazón ligero y ágil que no se deje atrapar por el bienestar inmediatista
Jesús recomienda otras dos actitudes: 
Primero, estar siempre alerta o espiritualmente despiertos. 
Y el espíritu de oración, que nos hace buscar siempre la voluntad de Dios.
• ¡Gracias, Señor Jesús, por el pan de tu palabra, que nos ha alimentado cada día durante todo este año!
 El creyente tiene que vivir siempre en vela, como el servidor que espera en cualquier momento la vuelta de su señor. 
Ora incesantemente para que no caigas en la tentación de abandonar el camino del seguimiento de Jesús. 

¡Ven, Espíritu Santo! 
Ora en mi interior.
Mantén despierta mi fe. 
Alienta mi esperanza. 
Aviva la llama de mi amor. 
Hazme generoso/a en la entrega a los demás.

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SAN JOSÉ

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Gracias, Señor.

El titulo de esta entrada me la ha do el Papa Francisco esta mañana en su tuit  @ Pontifex_es Termina un año y estamos a punto de comenzar uno nuevo. Se cierra un libro y empieza un nuevo libro con las paginas en blanco. Hoy es un buen momento para hacer balance del año, pedir perdón, dar gracias y pedir ayuda.  En el año que termina ha habido de todo, pero la certeza del amor de Dios ha estado conmigo todos los días. Su ternura la he sentido muchas veces, y muchas veces su mano me ha levantado. Gracias, Señor porque no termino el año sólo y el nuevo lo puedo empezar contigo. Por eso yo no le pido nada al 2015, yo se lo pido a Dios. En tus manos Señor pongo mi vida en este nuevo año 2015