Madre

 

“Todo el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre”.  (Mt 12,46-50)

El mayor elogio que Jesús hace de su Madre es que cumplió con fidelidad los planes de Dios.

Jesús en la cruz sigue pensando en nosotros. Nos da a su madre y en ella todo el amor. Cada vez que sintamos el peso de la cruz podemos ir a María; en ella encontraremos consuelo y paz para nuestro corazón.

 Pide a María que encienda en ti la llama del amor.  

Virgen del Carmen bella, Madre del Salvador. De tus amantes hijos oye el cantar de amor. Dios te salve, María, del Carmen bella flor, Estrella que nos guías hacia el sol del Señor. Junto a ti nos reúnes, nos llamas con tu voz. Quieres formar de todos un pueblo para Dios.

 

Madre,

bendice nuestros hogares

y a toda la humanidad

con tu paz.

Virgen del Carmen condúcenos hacia el Puerto Seguro: ¡el Cielo! , protegidos por tu Escapulario.