Conocer, amarle y seguirle



“Intentaban agarrarlo, 
pero todavía no había llegado su hora”.
 (Jn 7, 1-2. 10. 25-30).

Queda poco tiempo de Cuaresma. Revisa: ¿cómo está tu corazón ahora? ¿Estás preparado para la Pascua.

Conocer a Jesús, amarle y seguirle. Jesús sorprende porque con su propuesta de vida va más allá de lo que podíamos imaginar. Conocer a Jesús supone estar enamorado de Él, seguirle y vivir como Él vivió.

Jesucristo no ha venido a hacernos la vida más fácil, sino a dar sentido a nuestra existencia, también al sufrimiento y a la muerte. Él entrega su vida para salvar al mundo, esa es su “hora” y ese es el gran "signo" de su amor, un amor que este mundo no conoce.

Ser enviado es descubrir que no eres para ti. Que estas llamado a la apertura de una palabra que tú no pronuncias y te configura. Que vives disponible a una voluntad que te busca, te abraza y te quiere.

Señor, Jesús,
Pongo este día en tus manos,
es una nueva oportunidad que me das
para demostrar que mi vida vale
y que la esperanza
que pusiste en mí no va a ser defraudada.
Que pueda aprovechar todo
lo que la vida me vaya ofreciendo,
que pueda estar abierto
sin condicionar nada
sino admirándome de todo
y pueda crecer a medida que construyo
un mundo más humano. Amén


Comentarios

Entradas populares de este blog

"Señor, enséñame a orar"

Colaborar con el Señor

Gracias, Señor.