De mi familia

 


"Libro del origen de Jesucristo, 
hijo de David, hijo de Abrahán."
 (Mt 1,1-17).

No es simplemente una retahíla de nombres, es la explicación de que Jesús viene en medio de nosotros formando parte de un pueblo, con una tradición, una historia vivida y por salvar. No viene como un ser ajeno al mundo, sino dentro de una familia.

La genealogía de Jesús nos recuerda que Dios actúa en la historia concreta, con personas reales y vidas ordinarias. Tú también eres parte de esa historia; confía en que tu vida puede acoger su plan.

Jesús, el Hijo de Dios, no viene por generación espontánea; su encarnación asume el modo humano de venir a este mundo. Como todos los humanos, tiene antepasados; es verdad que, en ellos, estaba anunciado que sería grande, que sería hijo del Altísimo y que su reino no tendría fin.


El Evangelio de hoy es muy difícil de proclamar. Es una sucesión de nombres interminable. Nombres hebreos casi todos desconocidos para nosotros. ¿Qué Buena Noticia escuchamos hoy? Que Dios ama la fragilidad humana y asume su historia de imperfección y fragilidad. Todos los nombres propios que aparecen en el Evangelio son hombres y mujeres que como tú y yo comparten luces y sombras. Aciertos y errores, verdades y mentiras. Jesús no nace de la perfección e inmutabilidad divinas, sino que se encarna en la imperfección humana. Y por eso la salva.


 La genealogía de Jesús proclama que Dios salva entrando en la historia concreta, con luces y sombras, mujeres y varones, santos y pecadores. Adviento nos invita a leer nuestra “genealogía” con misericordia: ahí actúa Dios

Hoy reflexionemos sobre nuestra propia historia y misión. Agradezcamos a Dios por nuestras raíces, nuestra familia y experiencias, incluso aquellas que nos han marcado con dolor. Entreguemos nuestra vida al Señor para que, como instrumento en sus manos, podamos llevar luz a otros

Tú que entraste en la historia humana para llenarla de esperanza, haz de nuestra vida parte viva de tu genealogía de amor.  Señor, ayúdanos a confiar en que Tú obras en nuestra historia y la transformas con tu amor.

El origen de Jesucristo se entronca en una genealogía compleja y no perfecta. En ella aparecen tres mujeres: Tamar, Rut y la mujer de Urías, de la que no aparece su nombre. No son ellas las que engendran, sino de ellas. La cuarta mujer es María. De ella nace Jesús.
"Nació Jesús, llamado Cristo"
Él va a nacer porque quiere formar parte de tu historia, de tu vida.  ¿Quieres realmente que sea así? ¿Quieres ser testimonio y testigo de este momento?  ¿Estás preparado para ello.
 

Señor, 
gracias por hacerme parte de tu historia de salvación. Ayúdame a reconocer tu mano en mi vida 
y a vivir con el propósito de cumplir tu voluntad. 
Que mi vida sea un testimonio de tu fidelidad 
y amor a lo largo de las generaciones. 
Amén.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

SAN JOSÉ

Santa Teresa de Calcuta

La familia según el papa Francisco