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LA BIBLIA


No es un libro de estantería.

Sino un libro para leerlo y meditarlo.

La mejor estantería y biblioteca de la Biblia es tu corazón.

No es un libro de adorno.

Por eso no me gustan esas Biblias de lujo.

Prefiero esas sencillas, edición de bolsillo.

Porque la Biblia tiene que ser el libro de consulta en cada momento.

La Biblia hay que estudiarla y conocerla a fondo para llegar a su verdadero contenido.

Pero la Biblia hay que leerla, reflexionarla y meditarla.

Porque la palabra de Dios tiene que ser como esa lluvia suave que cada día empapa el césped de nuestros corazones.

La Biblia es "Palabra de Dios" y la palabra no es para los mudos sino para los que oyen y escuchan.

Tampoco la Biblia es para citar textos demostrando que la conocemos al dedillo.

Los demás, incluso los analfabetos, podrán leer la Biblia en el testimonio de nuestras vidas.

Si la tienes en casa, que ocupe un lugar de preferencia.

Si la tienes en casa, que sea un punto de referencia para tu vida.

Cuando tengas problemas, en vez de discutir quién tiene razón, ábrela y juntos leedla y dejaos tocar por su palabra.

Cuando sientas que Dios no te dice nada, ábrela y léela y presta atención, porque Dios te está diciendo algo.

Cuando sientas la tentación de pensar que Dios no te escucha, ábrela. ¿Le escuchas ahora? Si no le escuchas revisa las pilas del transistor de tu corazón porque es posible que estén gastadas y necesiten unas nuevas.

 http://www.iglesiaquecamina.com/1hojaparroquial.htm#uno

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