Actua

 


«Mi Padre sigue actuando, 
y yo también actúo»
(Jn 5,17-30)

 

“¿Cómo es mi fe en Jesucristo? ¿Creo que Jesucristo es Dios, el Hijo de Dios? ¿Esta fe me cambia la vida? ¿Hace que mi corazón se renueve en este año de gracia, este año de perdón, este año de acercamiento al Señor?
Se trata de una invitación a descubrir la calidad de la fe, conscientes de que esta es un don. Nadie merece la fe. Nadie la puede comprar. Háganse la pregunta: ¿Mi fe en Jesucristo me lleva a la humillación? No digo a la humildad: a la humillación, al arrepentimiento, a la oración que pide: Perdóname, Señor, y que es capaz de dar testimonio: Tú eres Dios. Tú puedes perdonar mis pecados”.
(Papa Francisco)

 Jesús es la imagen del Padre en la tierra. Sus gestos y palabras son la ventana que se abre para encontrarnos con Dios. Ya no tenemos una imagen etérea, difusa, idealizada. Dios es como Jesús es. Acogida, cuidado, presencia, compañía, providencia. El que ve a Jesús ve al Padre. Quien ama a Jesús ama a Dios.

Cuaresma es tiempo de recordar, que nos encontraremos ante el momento que decide nuestro futuro eterno. Construyamos desde ahora la Casa de Luz, donde habitaremos eternamente.


Jesús no hace nada por su cuenta, sino la voluntad de Dios.

Su mensaje es transformador, con 'potestad de juzgar', cambia las realidades, no deja indiferente y ante el cual hay que decidir, hay que optar. Su mensaje es novedoso, tanto por lo que anuncia como por la autoridad con que lo hace. Su mensaje es de Dios.

Escucharlo y creer en él es descubrir la vida eterna. El sentido de nuestra existencia es orientar nuestro ser y hacer a lo que Dios quiere, como quiere y cuando quiere, dejándonos hacer en su voluntad

El Espíritu nos infunde la valentía para ser amigos de Jesús frente al fanatismo y la intolerancia. Jesús se juega la vida en lo que hace. La fortaleza le viene de actuar como el Padre actúa. Dios es fuente de vida y Jesús da vida a manos llenas. Dios no se ha alejado de este mundo. El Espíritu Santo nos ama.

"Mi Padre sigue actuando".

"Mi Padre es un buen trabajador", parece decir Jesús. "Confiaos a sus manos a través de las mías, porque Yo también voy haciendo mi obra en cada uno de vosotros". (Dolores Aleixandre)

No estamos dejados de la mano de Dios... pero a veces se nos olvida que somos sus manos, sus pies, sus palabras... Dios actúa a través de ti, Dios necesita de ti... Toma conciencia de ello.

DIOS ACTÚA EN EL CORAZÓN DE LAS PERSONAS Y DE LA HISTORIA ¿Percibo el trabajo de Dios en mi vida y en el mundo? ¿Procuro colaborar con Él? Trabájame a tu estilo, con tu tierno pero firme amor, para que pueda construir tu Reino de Fraternidad.

No se puede creer en Dios y ser indiferente ante el dolor humano, pues Dios es amor compasivo y misericordioso ante toda miseria humana.

No dejes nunca de creer, de esperar, de redoblar la confianza. No dejes nunca de luchar por una sociedad más justa, por un mundo más humano y fraterno. No te rindas al mal. Es el Amor el que tiene la última palabra.

La muerte es parte inevitable de la vida. De nada nos sirve escondernos de ella, ignorarla. Es el único medio por el que conseguiremos vida eterna. Paradójico... ¿verdad?

Busquemos la intimidad con Jesucristo, para experimentar el amor del Padre y la Vida eterna en los acontecimientos cotidianos.

Espíritu Santo, empújanos a realizar la obra de Jesús: dar vida en abundancia, aliviar el sufrimiento de la gente. 

 



Orar para cambiar la vida

…Señor,
escucha nuestra oración,
atiende nuestros llamados.

Necesitamos tu aliento,
nos hace falta tu empuje,
¡que nos anime tu Espíritu!

Queremos caminar
fieles a tu Palabra,
cada día,
un paso adelante,
para cambiar de vida,
y dar testimonio concreto
de tu presencia en medio nuestro.
Ayúdanos a cambiar,
Padre bueno,
para que seamos testigos,
mensajeros,
y constructores de tu Evangelio
.

Marcelo A. Murúa


 


Comentarios

Entradas populares de este blog

"Señor, enséñame a orar"

Gracias, Señor.

Colaborar con el Señor