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Madre de la Iglesia



«Ahí tienes a tu madre"» 

(Jn 19, 25-34)

 

Cuando Dios había decidido venir a la tierra había pensado ya desde toda la eternidad en encarnarse por medio de la criatura más bella jamás creada. Su madre habría de ser la más hermosa de entre las hijas de esta tierra de dolor, y así fue. Todos conocemos la grandeza de María.

En la fiesta de la Virgen María, Madre de la Iglesia, el Papa invita a recuperar la dimensión femenina de la Iglesia: su nombre de mujer, cimiento en María, vocación fecunda, mirada de ternura, lenguaje de caricias, actitud de silencio, palabra contemplativa.

La Iglesia, como María, es madre.


Oración a María Madre de la Iglesia

María, tus hijos llenos de gozo,

Te proclamamos por siempre bienaventurada

Tú aceptaste gozosa la invitación del Padre

para ser la Madre de su Hijo.

Con ello nos invitas a descubrir

la alegría del amor y la obediencia a Dios.

Tú que acompañaste hasta la cruz a tu Hijo,

danos fortaleza ante el dolor

y grandeza de corazón

para amar a quienes nos ofenden.

Tú al unirte a la oración de los discípulos,

esperando el Espíritu Santo,

te convertiste en modelo

de la Iglesia orante y misionera.

Desde tu asunción a los Cielos,

proteges los pasos de quienes peregrinan.

guíanos en la búsqueda

de la justicia, la paz y la fraternidad.

María gracias por tenerte como Madre.

Amén.


 

 

 


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