Ir al contenido principal

Casa de oración


 “Mi casa será casa de oración”; pero vosotros la habéis hecho una “cueva de bandidos”.   
(Lc 19,45-48). 

No confundamos los lugares importantes de nuestra vida: el cine, el parque, con aquel donde encontramos a quién nos ama y espera. Nos recuerda que su casa se abre para todo el que llega con un corazón sincero y dispuesto a escuchar su Palabra.
Cuando perdemos el respeto a los lugares sagrados, olvidamos la esencia del vivir. Son espacios no solo físicos sino también humanos. Las personas son templos donde habita Dios. No se pueden utilizar, manipular ni infravalorar.
Jesús nos súplica que volvamos a casa y que volvamos a los brazos del Padre. Convertir nuestra vida en un negocio y olvidar que somos "casa", "hogar", "encuentro", es una profunda perversión. Nada refleja más nuestra identidad que compartir y convivir. Por eso nuestra fe nos lleva a compartir y convivir con Dios y descubrir que todo es templo suyo. La Gloria de Dios llena la tierra, ojalá la descubramos.



Señor Jesús, 
que purificaste Tu casa 
de todo lo que la profanaba, 
te pedimos que purifiques 
nuestros corazones y nuestras vidas. 
Haz que nuestros templos, 
tanto los físicos como los espirituales, 
sean verdaderos lugares de oración, 
de amor y de paz. 
Ayúdanos a vivir en integridad, 
alejados de todo 
lo que aleja nuestra mirada de Ti.
 
 
 
 
 
 
 
Hoy, al recordar la presentación de Tu Santa Madre, la Virgen María, en el Templo, te damos gracias por su ejemplo de humildad y obediencia. 
Que su sí a Tu voluntad nos inspire a entregar nuestras vidas a Ti con confianza, sabiendo que Tú nos guiarás en cada paso. 
María, modelo de fe, acompáñanos en nuestro camino hacia la pureza y la santidad.
Purifica nuestros templos, Señor, 
y que en ellos siempre se escuche Tu palabra, se viva Tu amor y se honre Tu santidad. Amén.


Los fariseos no saben cómo acabar con él. Todo sería más fácil si no hubiera tanta gente siguiéndole. No sólo eso: le escuchan con admiración, porque les habla de la vida, de su vida, y de un Dios enamorado de los pequeños, de los que no cuentan, de los que creen que Dios salva.

“Pendientes de Él”.  Fijos nuestros ojos en Él, no quitamos la mirada a su propuesta,  no alejamos el oído de su Palabra, preparados para salir a anunciar su mensaje,  el corazón dispuesto para una respuesta, los brazos abiertos para abrazar y acoger los hermanos.  Pendientes de Él en la vida de cada día, en los proyectos y sueños,  en la vida por hacer, en los encuentros que buscamos.

 


Comentarios

Entradas populares de este blog

SAN JOSÉ

Salve, José, amante y tierno padre. Salve, guardián de nuestro Redentor. Esposo fiel de tu bendita Madre y salvador del mismo Salvador. Al buen Jesús pudiste ver sin velo y sobre ti sus miembros reclinó. Al Hacedor de tierra, mar y cielo con cuánto amor le besas y te besó. ¡Oh, qué feliz el nombre de Hijo que dabas! Ninguno fue por Dios tan encumbrado como tú, José. ¡Oh, fiel guardián de nuestro Redentor! Dichoso aquél, José, que tú proteges y el que con fe te invoca en la aflicción, jamás, jamás lo dejas sin amparo y protección. ¡Oh, San José, amante y tierno padre, santo sin par y espejo de virtud! Haznos amar a la divina Virgen y a nuestro Dios y Salvador. “Protege, oh bienaventurado José, protégenos en nuestras tribulaciones. Defiéndenos de las asechanzas del demonio, protégenos con tu patrocinio, y ayúdanos y sostennos con tu auxilio para que podamos santamente vivir, piadosamente morir y alcanzar en los cielos la eterna bienaventuranza”. (León XIII)

Gracias, Señor.

El titulo de esta entrada me la ha do el Papa Francisco esta mañana en su tuit  @ Pontifex_es Termina un año y estamos a punto de comenzar uno nuevo. Se cierra un libro y empieza un nuevo libro con las paginas en blanco. Hoy es un buen momento para hacer balance del año, pedir perdón, dar gracias y pedir ayuda.  En el año que termina ha habido de todo, pero la certeza del amor de Dios ha estado conmigo todos los días. Su ternura la he sentido muchas veces, y muchas veces su mano me ha levantado. Gracias, Señor porque no termino el año sólo y el nuevo lo puedo empezar contigo. Por eso yo no le pido nada al 2015, yo se lo pido a Dios. En tus manos Señor pongo mi vida en este nuevo año 2015

Santa Teresa de Calcuta

UN ÁNGEL EN LA TIERRA   SEÑOR ENSÉÑANOS A AFRONTAR  LAS LUCHAS DE LA VIDA DIARIA “Señor crucificado y resucitado, enséñanos a afrontar las luchas de la vida diaria, para que vivamos en una mayor plenitud. Tú has acogido humilde y pacientemente los fracasos de la vida humana, como los sufrimientos de tu Crucifixión, así pues, ayúdanos a vivir las penas y las luchas que nos trae cada jornada como ocasiones para crecer y asemejarnos más a Ti. Haznos capaces de afrontarlas pacientemente y con coraje, llenos de confianza en tu apoyo”. (Santa Madre Teresa de Calcuta) "Líbrame, Jesús mío, del deseo de ser amada, del deseo de ser alabada, del deseo de ser honrada, del deseo de ser venerada, del deseo de ser preferida, del deseo de ser consultada, del deseo de ser aprobada, del deseo de ser popular, del temor de ser humillada, del temor de ser despreciada, del temor de sufrir rechazos, del temor de ser calumniada, del temor de ser olv...