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El cumpleaño de María




“No tengas reparo en llevarte a María” 
(Mt 1,20)

Dios tiene un proyecto para cada uno.  
A primera vista nos parece inalcanzable, pero nos regala la presencia de María, la que siempre va abriendo camino.
Vive tu fe con María.  
 No tengas reparo en abrirle la puerta de tu corazón. 

¡Qué hermoso abrirte la puerta, María!  
¡Qué alegría cuando mis ojos se encuentran con los tuyos! ¡Qué gozo acoger siempre tu regalo: a Jesús!

María está estrechamente unida al proyecto salvador de Dios.
Proyecto que Él mismo va llevando a cabo. Contando siempre con la colaboración libre y responsable de las personas.
Desde la primera página, el evangelio de Mateo habla de María como la persona escogida para ser madre de "Jesús, el Mesías", "Dios-con-nosotros", salvador, cuyo origen no puede explicarse con criterios humanos ("obra del Espíritu Santo").

- María, madre de Jesús y nuestra, 
haznos disponibles como tú a colaborar 
en el proyecto de Dios 
en bien de nuestros hermanos.

Hoy celebramos el nacimiento de la Virgen María. 
No podemos leer el Evangelio correspondiente a ese momento de su vida, sencillamente porque no existe.
Es significativo: la mujer que Dios eligió y preparó para ser la madre de su Hijo no es una princesa, ni siquiera la hija de un personaje famoso, es una mujer sencilla, desconocida, humilde.

Aprovechamos esta fiesta del cumpleaños de María para felicitarla:

¡Felicidades, Madre! Felicidades por Ti, por tu nacimiento.
Felicidades, Madre, porque creciste en el oscuro camino de la fe.
Felicidades, Virgen peregrina, porque nos enseñas la ruta de la santidad.
Felicidades, Madre, porque un día, un mes, en un lugar, de unos padres...
naciste como cualquiera de nosotros  y sin embargo de Ti nacería el Salvador del mundo.
Felicidades, por estar siempre atenta ala palabra del Señor.
Felicidades porque tu vida fue un Si a la voluntad de Dios.
Felicidades, María, porque eres la Madre de Dios.
Feliz soy yo también por tenerte como madre.

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