Jesús viene a habitar tu casa
“Zaqueo, baja enseguida,
porque hoy tengo que alojarme en
tu casa” (Lc 19,5).
Jesús, el Hijo del hombre
salva lo perdido,
lo despreciado,
lo que no cuenta ante los ojos humanos.
Cuando Jesús viene a habitar tu casa,
a
hospedarse contigo,
te invita también a cambiar de vida,
a ser compasivo,
como
lo es el Padre del cielo.
Jesús,
ven a mi corazón,
siéntate a mi lado,
abre mis
egoísmos y avaricias.
Que tu salvación me haga misericordioso/a y solidario/a.
Comentarios
Publicar un comentario