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ORACIÓN A NUESTRO SANTO ANGEL DE LA GUARDA




“El que acoge a este niño en mi nombre me acoge a mí” (Mt 18,3) 
Los discípulos discuten sobre quién es el más importante. No han comprendido nada de la lección de Jesús, 
que va entregando la vida por los caminos. 
- Pide al Espíritu que te haga caer en la cuenta 
de que la acogida y el servicio 
son los rasgos esenciales del seguidor de Jesús. 

Dame, Señor, un corazón de niño, capaz de abandonarme en las Manos del Padre, como Tú. Que busque más servir, que ser servido.

ORACIÓN A NUESTRO  
SANTO ANGEL DE LA GUARDA
 
Ángel Santo, amado de Dios,
que después de haberme tomado,
por disposición divina, bajo tu bienaventurada guarda,
jamás cesas de defenderme, de iluminarme y de dirigirme:
yo te venero como a protector, te amo como a custodio;
me someto a tu dirección y me entrego todo a ti,
para ser gobernado por ti.
Te ruego, por lo tanto, y por amor a Jesucristo te suplico,
que cuando sea ingrato para ti
y obstinadamente sordo a tus inspiraciones,
no quieras, a pesar de esto, abandonarme;
antes al contrario, ponme pronto en el recto camino,
si me he desviado de él;
enséñame, si soy ignorante; levántame, si he caído;
sostenme, si estoy en peligro y condúceme al cielo
para poseer en él una felicidad eterna.
Amén.
(San Juan Berchmans)

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